En la mayoría de casas, hoy en día, existe un miembro de la familia que llega y se roba tu corazón. Está ahí por una u otra razón, es regalado, comprado, adoptado o simplemente se mete y se adueña de los sentimientos mas sinceros. Así ocurrió con Sofiel.
"Para los que no conocen la historia que vivió mi perrita con el moquillo y como la salvé, les dejo el enlace. https://moquillocanino-distemper.blogspot.com/
La incertidumbre de no saber si en cualquier momento nos iba a dejar era agobiadora, si podía salir sin contagiar o si la enfermedad repetía, eran muchas de las preguntas que nos hacíamos.
Luego de alrededor de dos meses nos aventuramos a salir y dejar que la vida se encargara de seguir su curso. Para fortuna de nosotros todo empezó a marchar bien, pues al entrar en contacto con otros perros estos no manifestaban la enfermedad tiempo después.
Esta es la vida de Sofiel luego del moquillo
Tiempo después de su enfermedad notamos que se le dificultaba ver muy bien ya que un día al estar frente a casa un automóvil paso y la golpeó, ella no se había percatado de lo que pasaría, al igual no reconocía a miembros de la familia sino hasta que se acercaba a olerlas, esa zona azulosa en sus ojos no se fue del todo sino hasta que pasó mucho tiempo, en la que fue mejorando.
Otro aspecto que notamos en su salud son los problemas de piel, no sabemos si están relacionados con la enfermedad o su baja de defensas ya que manifiestaba resequedad, hongos e hipersensibilidad. Para esos problemas el veterinario nos recetó:
-Descensor
-Hemolitan
-Camotox
-Bravecto (cada 3 meses)
-Sistema endectocida (cada 15 días)
-Baños con shampoo Demo holliday y Bañol.
Todos seguidos al pie de la letra, la verdad en algo le calmó pero siguió presentando algunos brotes. (no automediques a tu mascota)
La resequedad que presentaba en sus cojines nunca se fue, para este problema sólo optamos por agregarle una hidratante o vaselina.
El peor de los problemas fue en su boca, hasta hace alrededor de dos años nos dimos cuenta que le faltaba un diente y esto muy seguro se debe al moquillo ya que sus dientes, en ese entonces, se tornaron marrón precedido de un fuerte mal aliento. Nuevamente como buenos dueños consultamos para ese mal, nos recetaron unos comprimidos Stomorgyl, que se le suministraban uno diario por 4 días. Adicionalmente tenía su cepillado y un enjuague bucal.
Les cuento que no ha sido fácil pero desde que uno se comprometa con una vida es para hacer lo humanamente posible por preservarla.
No hemos tenido problemas con su alimentación, come de todo si se le permite, sólo se alimenta con concentrado y una vez a la semana se le humedece con caldo de pollo, se acuesta para comer, ya no es tan enérgica como años atrás.
Pienso en el momento que ya no esté y doy gracias que no sólo fueron 6 meses sino que serán mucho más de 8 años.
Su pasatiempo favorito, dormir.